Bajo una lluvia de calamidades,
llegó para cambiar miedos e inseguridades,
por ciento y una bondades.
Sus sueños me recibieron.
Escuché niños, me sonrieron.
Paisaje más que sorprendente.
Diez lunas o soles de poniente.
Extrañas y gruesas rocas,
entre grandes y verdes copas.
Troncos que sostienen mi alma,
a salvo gracias a sus habilidades.
Se alejan olas vuelve la calma…

 

 


No hay comentarios hasta ahora.

Deja una respuesta

Su dirección de correo electrónico no será publicada. El campo del sitio web es opcional.

COMENTARIOCOMENTARIO
Tu NombreTu Nombre
EmailEmail
WEBSITEWEBSITE